Los jóvenes en la política
En el presente, la incursión de los jóvenes en la actividad política, es percibida con cierta esperanza y optimismo por parte de la generación adulta, constituyéndose en un punto a favor para nuestros fines, lejana a la percepción que se tenía en el pasado.
Su papel en los partidos y movimientos políticos, ha pasado de ser simples propagandistas a lograr elaborar planteamientos que se incorporen a las propuestas de cada una de estas organizaciones, pero aún no se ha conseguido llegar al proceso de toma de decisiones.
La preocupación por parte de la colectividad, en la participación política juvenil, pasa por la inevitable e irresistible manipulación de los que ejercen el poder en estos grupos.
La ley del Concejal Joven, propuesta y promulgada por el presidente García, consiguió que un número importante de jóvenes en el país ingrese a la política. Es una norma que marca un avance en esta evolución, pero desde mi punto de vista se centra solo en la cantidad y no en la calidad de quienes pretenden ser autoridades.
Si somos conformistas con el actual sistema, podemos decir que partidos como el APRA, Unidad Nacional, Partido Nacionalista y Acción Popular, se propongan trabajar con los jóvenes de su agrupación; ya que son los que cuentan con los recursos necesarios para promover a esa gran legión de entusiastas peruanos a asumir una responsabilidad al interior de su partido y en las esferas del Estado.
Pero la verdad, es que debido al desprestigio de las tiendas políticas y a la pésimo comportamiento ético de sus representantes; es mejor que la sociedad joven genere sus propios espacios, sin el control de quienes fracasaron en la política y de quienes vieron en el ejercicio de la misma, una vitrina de figuración y más aún una oportunidad para enriquecerse.
Necesitamos una juventud conocedora de su realidad, preparada, conectada con su entorno y con el mundo, segura de sí, que asuma desafíos, consciente de su rol y del compromiso que le toca.
Lo desarrollado por el Jurado Nacional de Elecciones; a través de la Escuela Electoral de Gobernabilidad es meritorio pero debe ser más descentralizado, puesto que esta institución del Estado cumple una función vital en esta labor.
Tenemos que tener muy en cuenta que es necesario que los jóvenes participen en política, pero esta debe ser producto de un esfuerzo planificado y sostenido.